¡Cuánto nos cuesta!
Pedro Navazo
Ibrahim Abed |
Lunes, 6:30 horas: suena el despertador. Me levanto perezoso y la costumbre da paso a las rutinas de cada mañana: desayuno, ducha, aseo…
Salgo de casa de mal humor y subo al metro hacía el trabajo. Tomo asiento frente al ocupado por un señor con una revista en las manos. Preso aún del sueño —el fin de semana ha sido duro— no presto atención a la revista. El destino de mi viaje exige hacer transbordo y tomar otro tren: casualmente, el pasajero de la revista y yo bajamos en la misma parada. Pese a andar detrás de él por el andén, lo pierdo de vista entre el gentío existente a estas horas. Como si el destino lo hubiese programado, subo al segundo tren y vuelvo a colocarme, esta vez de pie, al lado del pasajero de la revista: bajamos nuevamente en la misma parada y subimos por las escaleras que dan acceso a la calle, otra vez a pocos metros de distancia. Y al fin me percato de la revista, El Semanal, así como de la noticia de la portada en letras grandes y negras: Tres millones de niños españoles son pobres…
Conclusión: ¡Cuánto nos cuesta darnos cuenta de la gravedad de lo que tenemos a nuestro alrededor!
Así es, en nuestra vida , nuestra burbuja, miro hacia otro lado. Buen artículo para reflexionar. Y tiempos de crisis, llevamos varias, los ricos se hacen más ricos, o surgen nuevos ricos. La pobreza aumenta, este mundo nuestro no cambia.
ResponderEliminarEs similar en todos lados, buena "reflexión". Gracias.
ResponderEliminarUna desgracia tremenda
ResponderEliminarVemos las cosas buenas que la vida nos ofrece, disfrutamos de la belleza que nos rodea, pero lo que nos produce tristeza lo intentamos colgar, separar, apartar de nuestra mente para que no nos dañe y aunque sigue ahí, a la vista, no hacemos nada para solucionarlo, nos justificamos diciendo que poco podemos hacer para evitarlo pero, si todos nos quedamos parados nunca solucionaremos nada, por eso es importante que haya gente que, como tú, nos motive.
ResponderEliminar