28 septiembre 2016

Brindis por Gora y Aitor

Julio Sánchez Mingo
24 de septiembre de 2016

Buenas tardes a todos:

Hace quince años, en mayo de 2001, la vida nos asestó un duro golpe y la pena, el dolor y una profunda tristeza se apoderaron de nosotros. Hoy, afortunadamente, nos llenamos de alegría. Entonces perdimos a un miembro muy querido de la familia. Ahora acogemos en esta maravillosa estirpe de los Lebeña Caldevilla a un nuevo integrante, a Aitor, que se nos ha casado con Gora, mi querida Gorita.

La conocí cuando llegó a Madrid para vivir con sus hermanas en la calle de las Huertas y estudiar en el Isabel la Católica, unos de los institutos con más solera de la ciudad. Era poquita cosa, muy calladita, muy blanquita. Ahora es una mujer con todas las de la ley, con carácter, mandona, muy habladora. Pero no te asustes, Aitor. Perro ladrador, poco mordedor. La rama.. digamos.. impulsiva y vehemente de las Lebeña Caldevilla tiene un gran corazón. Son, sin duda, muy dulces y tiernas. En Catania, en la tierra de la Cosa Nostra, la mafia siciliana, he visto a un avezado, orondo y bien nutrido policía derretirse ante los encantos y el hechizo de una de las representantes más genuinas y aguerridas de ese linaje.

Gora, Aitor, ahora empezáis una singladura que os deseo sea larga, fructífera y feliz. No estará exenta de peligros, tormentas y tempestades. Pero una buena tripulación sabe sortear todas esas dificultades y los escollos que la navegación presenta. Una experta en diagnósticos clínicos y un consumado piloto no van a tener dificultad alguna. Además, con mi receta es fácil: Bogar en la misma dirección, respeto mutuo, desterrar el egoísmo, mucho diálogo, capacidad de renuncia, sacrificio personal, compartirlo todo y mucha complicidad intelectual.

Como os diría nuestro querido y admirado Antonio Machado,

...De hoy más la tierra sea
vega florida a vuestro doble paso. (1)

Gora, Aitor, ¡qué seáis muy dichosos!


(1) Antonio Machado: Bodas de Francisco Romero. Nuevas Canciones (1917-1930)



08 septiembre 2016

Un paisaje que ya no existe
Julio Sánchez Mingo
7 de septiembre de 2016



Este paisaje ya no existe. La foto fue tomada el pasado sábado 13 de agosto. Un incendio ha arrasado la zona de Coll de Rates y Bolulla, en Alicante, y ha acabado ayer y anteayer con la vegetación de estos que fueron bellísimos barrancos, que en su día cultivaron los moriscos. Un nuevo atentado contra la madre Tierra.